La verdad es que nos ha sorprendido gratificamente. Los que llevan el local son franceses, aunque el menú es más italiano con pizza y pasta el menú vale 12 euros, muy completo donde se puede elegir entre muchas entradas y para el segundo, se puede elegir casi cualquier cosa de la carta. con los postres eran limitados, sólo teníamos una opción porque carecían de las otras opciones, pero era casera y muy rica. Hubo un poco de malentendido con la cuenta que cambió. no hablan bien el lenguaje así que comunicarse es complicado pero la comida vale la pena, una pizza muy recomendable.