Lugar de espera para disfrutar de una buena cocina. Vinimos del sur a bilbao cuando vimos la señal a la parrilla y nos detuvimos. Nos encantó el trato que teníamos de la camarera muy amigable y familiar y luego el dueño nos dio las gracias por venir a conocerlo. Se lo recomiendo a todos y por supuesto volveremos. Fue un éxito total.