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"El restaurante tiene una carta de presentación, para mí, insuperable, la entrada es como un jardín zen. Lo he visto con nieve y mola más al encontrarse en una casa antigua con muy poca iluminación (la que tiene una luz indirecta y velas), para mi gusto la luz indirecta es mucho mejor, más íntima. Recomiendo el chorizo, la morcilla y el queso. La carne es espectacular (pero como en todos los restaurantes en el molar). Al final de la comida puedes visitar las cuevas, así que vale la pena agregar un video para ver la entrada, ¿de acuerdo?"
Teléfono: +34918410393
Dirección: Calle De La Loma, 17, 28710 El Molar (Madrid), Spain
Ciudad: El Molar
Sitio Web: https://www.elmolar.org/
Platos: 0
Categorías: 2
Reseñas: 5
La presentación del restaurante es inmejorable para mí. La entrada es como un jardín zen, especialmente hermoso cuando está nevando. Está ubicado en una antigua casa con una iluminación mínima (que incluye algunas luces indirectas y velas). Personalmente, prefiero la iluminación indirecta ya que crea un ambiente más íntimo. Recomiendo probar el chorizo, la morcilla y el queso. La carne es espectacular (aunque similar a la de otros restaurantes en El Molar). Al final de la comida, se puede visitar las cuevas, por lo que vale la pena. Adjunto un vídeo para que vean la entrada. ¿Qué les parece?
Ya no se recomienda este restaurante. Habíamos ido varias veces a comer, siempre elegimos dos menús degustación, antes llamábamos al menú pagador y es la última vez (marzo de 2018) que la experiencia dejó mucho que desear, un plato lleno de hongos, nos sirvieron dos setas truncadas, que apenas darían para un comensal. Pedimos una copa de rioja y trataron de cobrar la botella entera. El lamentable servicio al cliente. Además, es común reservar una mesa y cuando llegan han reservado más de la cuenta al mismo tiempo y tienes que esperar mucho tiempo.
Ya no es recomendable. Hemos ido varias veces a comer, siempre elegimos dos menús degustación, antes llamado menú Payador y esta última vez (marzo 2018) la experiencia dejó mucho que desear. De un plato rebosante de setas, han pasado a servir dos setas troceadas, que apenas darían para un comensal. Pedimos una copa de Rioja e intentaron cobrarnos la botella entera. La atención al cliente lamentable. Además, es habitual que reserves mesa y cuando llegues hayan reservado más de la cuenta en el mismo horario y tengas que esperar de pie un buen rato.
El restaurante tiene una carta de presentación, para mí, insuperable, la entrada es como un jardín zen. Lo he visto con nieve y mola más al encontrarse en una casa antigua con muy poca iluminación (la que tiene una luz indirecta y velas), para mi gusto la luz indirecta es mucho mejor, más íntima. Recomiendo el chorizo, la morcilla y el queso. La carne es espectacular (pero como en todos los restaurantes en el molar). Al final de la comida puedes visitar las cuevas, así que vale la pena agregar un video para ver la entrada, ¿de acuerdo?
