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Valoración media
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Un descubrimiento gracias a Google Maps y a que estábamos en la zona. Hay que reservar primero porque está lleno. Es delicioso de comida y a muy buen precio. Tienen precio de menú. Lo primero a destacar en los primeros y segundos es la calidad de los ingredientes. El aceite de oliva es buenísimo. Y eso lo noté en la ensalada de mató con confitado de tomate, que estaba excelente. Después pedí unas butifarras. La negra era la mejor. Con patatas fritas muy finas y nada grasosas. Estaban muy crocantes. De postre, la tarta de queso casera que estaba sublime. Y un helado de turrón de jijona con chocolate. Muy, muy rico. Entre cuatro pagamos casi euros. Nos pareció muy bien de precio considerando la abundancia de los platos y la calidad de los mismos. Me encantaría volver y repetir. Lo recomiendo demasiado.