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Valoración media
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Nunca había tenido, en España, una experiencia tan auténticamente italiana como ésta. Selección de quesos italianos, Pecorino, Grana Padano y Pecorino trufado con vino Primitivo di Manduria que fue una auténtica delicia. Acompañaban unas aceitunas pequeñitas, sin hueso, adobadas y en aceite; exquisitas.Después una pizza Napolitana, en su punto y con ingredientes muy buenos (el chef me enteré que es de Salerno) con una cerveza Peroni.En Italia no podría haber sido más Italiano... y, posiblemente, tampoco mejor.