4 /5
Valoración media
★
★
★
★
La copa valenciana final que vimos allí. Somos de fuera y estábamos en un hotel cercano así que nos acercamos, sin reservas, pero tenemos una mesa. No sé cuántas pinturas de Erdinger pedimos, pero creemos que a pesar de ser un bar de cervezas importadas y marcas raras, son una cara de cáscara (5€ cada pintura) al menos por lo que pagamos en nuestra ciudad, pero lo entendemos y lo disfrutamos tal como estábamos en el viaje. En cuanto a la cena, se entiende que es un bar de cerveza y no un restaurante. Pedimos cortar algunas patatas de bolsa y algo de sobra y queso. Pedimos una pizza de atún que pensamos que era un poco más grande pero vamos a ser ricos, y terminar algunas alas de pollo que eran las mejores, no sé qué salsa llevaban pero volaban.