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Valoración media
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UNA CARTA MUY AMPLIA CON PRODUCTOS DE PRIMERA CALIDAD, CON MUY BUENA COCINA. La carta es amplísima y con productos de primera calidad, lo que hace que los precios sean bastante altos. Aquí prima el sabor, es una cocina clásica y seria. Se puede comer desde un buen pescado hasta un enorme chuletón de buey a la brasa de leña, para lo que disponen de una amplia parrilla, pasando por choquitos, arroces varios,… Y en temporada bastantes platos de caza, y así en esta ocasión le dimos prioridad a la caza: jabalí estofado con fabas de Lourenzá, bueno, y perdiz con verdura, muy buena, destacando el extraordinario sabor que alcanza esta verdura, cocinada con mucho mimo y tiempo. Los postres buenos, de los que destacaría las torrijas, muy buenas. El comedor es muy bonito y muy cómodo, con un menaje elegante y un servicio familiar y muy atento. Una buena comida con un vino aceptable por 40 euros persona.