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Valoración media
★
Pasamos por casualidad y había una mesa libre, como no veía al camarero entré en el bar. Nos podemos sentar en la terraza ? Me dice el señor de la barra que si, pero que le pida a él la bebida y nos la llevamos. Le digo a mi hijo que vaya mientras a sentarse en la mesa. Mientras me estaban sirviendo la bebida vuelve mi hijo y me dice que un “señor” le ha dicho que esa mesa estaba reservada… por supuesto no tenía cartel ni nada… Viene el “señor” que no sabemos si era camarero o qué y vuelve a repetir que la mesa estaba reservada, me quedo mirando al camarero de la barra que estaba sirviendo las bebidas y se encoge de hombros. Como colofón el “señor” suelta… es que hay que preguntar !!! No se puede sentar sin preguntar!!! Si usted reserva mesas existen unos cartelitos muy monos para ello… y el de la barra debería de haber dicho algo porque YO si que pregunté… Pero bueno, ahí se quedaron por supuesto las bebidas servidas junto a la mala educación del dueño o lo que fuera… que se piensa que tiene estrella michelin… no he visto nada igual…