Restaurante con una excelente materia prima, extensa carta y bien cocinada. El problema es el mal servicio, lento y con feos detalles que no están a la altura de un restaurante de la categoría que pretenden. Para empezar la recepción fue mala, nos acompañan a la mesa y nos tiran literalmente una tarjeta con el código qr de la carta en dicha mesa, sin esperar a que nos sentemos ni acomodarnos. Pedimos recomendaciones de plato y nos dice el metre que depende de gustos, no puede recomendar….. mucho tiempo en servir la bebida, dejando la botella de vino en una champanera que posteriormente ni sirven.Por último y como recomendación, el hilo musical es muy molesto, música muy alta y con una malísima calidad de sonido…..En resumen, buenos platos, mal servidos, que hacen que la experiencia no sea completa