buen arroz, servicio fantástico de camarera, muy agradable y atento. la marca de la casa del jefe: sale para tomar nota, pedimos un cromo de carabineros, entre otras cosas, para probarlos. es incorrecto servirlos y notamos en la primera mordida. Le decimos a la camarera y dice que no nos preocupamos, que habíamos pedido el carabinero y fue un error, que va a los otros ahora mismo. No hay problema, seguimos comiendo. Y cuando pedimos la cuenta, sorpresa nuestra, nos cobran las croquetas de carabineros y las de jamón. Le decimos a la camarera que nos parece un gerente feo porque el error era suyo, no el nuestro. Y los pobres, avergonzados, no pueden dar explicaciones más, son órdenes de su jefe. Bueno, nada, lo pagamos y apuntamos. Pero no así, Sr. Jefe. el error es tuyo, y así que los errores no tenemos que pagar a los clientes.
