Nos hemos ido tres amigos y hemos pedido una rebanada de navajas, que eran un pelaje pasado, y un arroz cremoso de guijarros y carabineros. Era muy sabroso y la cantidad es muy generosa. Te dejan la paellera y nos dieron para comer dos platos cada uno, y el que ha dejado los ha puesto para llevar. Hemos salido a unos 26 euros por persona, y hemos tenido una botella de albariño, una cerveza, un cuchillo, arroz, dos postres, un café y un corte. No conocía el restaurante. simple, con mucha gente y el servicio rápido y agradable.