El menú fue actualizado por el chef Antonio de Livier, así que varias de sus creaciones basadas sobre todo en mariscos y pescados le dan un toque gourmet a las botanas, entradas y platos fuertes para acompañar la copa, la cerveza o los cocteles de frutas, como el que sirven de guanábana y mango verde o incluso, agua natural de coco con trozos de dicha fruta dentro.Probé el escabeche de camarón, bastante bien sazonado y con berros, el dip de que sirven de jocoque con hierbas está fresco y alivia un poco el hambre en lo que llegan entradas y plato principal. Además de mariscos, hay otras entradas como los tacos dorados de pato confitado o unas gorditas de chicharón que, la verdad, no estuvieron muy espectaculares.La atención es esmerada, la música es variada tirándole a pop y contemporánea en español, aunque hubo algo de electro en las primeras horas de la noche.