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Reseña
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Nos detuvimos en Akatz cuando visitamos el pueblo pesquero de Bermeo. Este es un buen bar de tapas, cerca del parque y del centro de visitantes. Tomamos un café realmente bueno y té de una tetera de hierro. También comimos tapas de alta calidad, en el estilo regional de todo servido con palillos o pinchos. Los langostinos estaban en una salsa de mariscos maravillosamente condimentada y se sirvieron con una baguette suave. La decoración era básica, pero el servicio fue bueno y el marisco realmente maravilloso, especialmente a su precio muy razonable. Vale la pena visitarlo si estás en la ciudad.