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Reseña
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Llegamos al restaurante alrededor de las 9pm y éramos los únicos clientes. Pensamos que esto no era una buena señal, pero pronto el restaurante se llenó. La camarera era muy amable y hablaba un inglés perfecto. Estaba atendiendo todas las mesas por su cuenta y era muy eficiente. La comida era muy buena, las porciones eran grandes y se servían rápidamente. La ambientación del restaurante es un poco austera y la iluminación un poco demasiado brillante, pero en general muy buena. La cuenta final fue de 29€ para dos, con mucha comida y unas cuantas cervezas. Si tienes ganas de comer chino, recomendaría este restaurante. Solo necesitan trabajar un poco en la ambientación.