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Reseña
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Esta marisquería es, sin ningún tipo de duda, uno de los mejores restaurantes para cenar en Castellón, si tu intención es comer pescado fresco, cocinado a la perfección y presentado con mucho gusto.El local es elegante, acogedor y muy limpio. De hecho, diría que sus baños son los más limpios que he visto nunca en un restaurante.Tuvieron el detalle de preparar nuestra mesa en un pequeño reservado y estuvimos muy tranquilos y cómodos.El servicio es encantador, en general, cercano y rápido, sobretodo la camarera jovencita. Un auténtico placer ser servidos por ella.Respecto a la comida y el vino blanco… Sublime. Raciones más que cumplidas (no nos lo pudimos terminar todo) y surtido de postres espectaculares, opción que nos aconsejó la camarera y quedamos encantados. Para repetir.