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Reseña
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Soy cliente habitual del Restaurante, mínimo dos veces al mes. Hoy he salido defraudado. Al llegar ya he notado un ambiente enrarecido, el propietario prácticamente no me saludado y ni me ha mirado. Como siempre he pedido caracoles, excelentes. De segundo el Steak tartar encima de hueso con tuétano a la brasa. Una decepción, el hueso estava pero el tuétano todavía lo estoy buscando. La carne era sencillamente carne picada sin sabor, muy dulce, no han puesto ni sal ni ningún condimento. Teniendo en cuenta el precio del plato, casi 30 €, un fracaso. Para rematar pido postres y no me ponen cubiertos, sería para que me chupara los dedos. Espero que esto solo sea un lapsus. Evidentemente Volveré,...