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Reseña
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La decoración es cuidada, el trato es agradable y rápido, y los espacios están limpios. Es un lugar bastante pequeño y popular, por lo que es mejor reservar, incluso un lunes por la noche. Lo mejor sin duda es la hamburguesa Chalá, con una carne jugosa y en su punto sin necesidad de especificar la cocción, acompañada de chips fritos a la perfección. También recomendamos las patatas bravas, con una salsa de tomate y pimientos picante, el salmón con mango y el potente sándwich de pollo. Las croquetas son cremosas y no están grasientas. Los rolls tailandeses son deliciosos aunque la salsa puede hacer que se humedezcan un poco. Ofrecen una buena selección de cervezas y vinos. Las fotos salen bie...