5 /5
Reseña
★
★
★
★
★
Hay numerosos bares de tapas a lo largo de esta calle, algunos modernos y relucientes, otros todavía pequeños y acogedores y auténticos locales como estos. No hay una amplia variedad de tapas en la barra, en la que solo había aceitunas y brochetas de pulpo durante nuestra visita... ¡pero ambos estaban deliciosos, acompañados de un vino blanco seco por 1,40 € la copa! ¡Hay solo unas pocas mesas y la decoración es de estilo antiguo en tono verde! ¿El personal tal vez sea el hijo del propietario que habla varios idiomas? Tienen algunas comidas más grandes en la oferta, que parecían muy apetitosas. Para una experiencia auténtica en Hondarribia, este bar es imprescindible.