El Faro - Reservar una mesa

Estábamos de vacaciones por la zona y decidimos comer aquí por el precio del menú (12€ . La comida es acorde al precio del menú y el trato ligero y rápido porque hay gente esperando. El problema fue al llegar al postre que nos ofrecieron únicamente dos alternativas (yogur y flan industrial . Bueno, pensamos, las cosas se acaban, pero nuestra sorpresa fue cuando llega el turno de los postres en la mesa de al lado y les ofrecen 6 postres diferentes a elegir. Pedimos una hoja de reclamación y después de darnos largas y pedirnos que subiéramos a las cocinas a ver cómo funcionan, sale una señora ni se presentó por lo que intuyo que era la encargada y de muy mala leche me da la hoja advirtiendo que como la firmara despediría a los dos camareros que nos atendieron. Finalmente el chantaje emocional tiene su efecto en mi y le voy a dar la hoja sin firmar y a pagar pero al ver que no firmo la señora se crece y gritándome me dice que cuidado con lo que hago mientras alza el dedo amenazador. No recomiendo ir allí por el trato, por el chantaje, por jugar con la sensibilidad de las personas ante el desempleo de los demás y por una actitud arisca y maleducada ante un derecho del cliente.

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El menú del día es realmente malo además de escaso. De primero probamos un pote asturiano que bien podría ser de Litoral , pues de la ventana de la cocina asomaban botes de garbanzos en conserva. De segundo, lo más pasable, el filete con patatas fritas, así de triste, olvidense de degustar algún plato típico del lugar. Sobre la fritura de pescados mejor no hablar, al menos no me ha sentado mal. Todo ello regado con un vino peleón que ya traían descorchado del interior, pasable sólo motablemente rebajado con gaseosa. Para terminar lo mejor la selva negra, y eso porque la habían adquirido en otro establecimiento, al igual que el resto de los postres. Téngase en cuenta que es uno de los menús mas baratos de Cudillero, en la zona del puerto los tienen por 2,5€ más... Habría merecido la pena intentarlo

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un pequeño pueblo pesquero. Lo que más llamó nuestra atención es la paliza de esas casas. Parece que se ponen el uno al otro. También nos gotearon calles tan estrechas y empinadas. Da la impresión de que en cada esquina hay algo que descubrir. lo que realmente se enamoró de nosotros fue el restaurante que el faro pidió una mariscada y una variedad de quesos típicos. la atención era muy buena y la comida más deliciosa. Es un placer comer mariscos que sabes que han pescado ese mismo día. Incluso en algún momento un pescador, con quien el dueño tenía amistad, hablaba durante un tiempo. algo impensable en una marisquería de cualquier otra ciudad o ciudad. Nos encantó el ambiente íntimo y actual del restaurante, que lo hace ideal, tanto para una comida familiar como para una cena con su pareja.

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un lugar verdaderamente exitoso para lo que nos interesa, que es comer bien, a pie de puerto y a un precio que hace la visita ronda. La cecina con patatas fritas es espectacular. y no te digo lo rico que el arroz se dejó con un bogavante que era de la lágrima más pintoresca y el reflejo del color de esas tierras y personas.

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Menú de 10€ espectacular y muy abundante!!!! magnífica atención!! situado en el puerto de cudillero,Asturias.Es un típico pueblo pesquero Asturiano. Dificultad a la hora de aparcar el coche,por lo demás perfecto!!!!

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