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"Es un sitio modesto, obviamente, pero con el trato amable de su gente, unas raciones de productos locales generosas a buen precio, no saldrás descontento, seguro."
Platos: 16
Comodidades: 3
Categorías: 5
Reseñas: 68
El domingo es día de mercado en Villaricos. Para las diez de la mañana, el lugar está lleno de gente que viene a comprar frutas y verduras o simplemente buscando algo especial a un precio de ganga. En algún momento necesitan recargar energías y muchos van a El Gato. ¿Por qué? Porque es el mejor, tanto en comida como en ambiente. No tiene sentido pedir un menú. Abrirse paso entre la multitud alrededor de la barra mientras uno de ustedes "reserva" una mesa (la táctica es estar en alerta y saltar en cuanto se libere una). En el extremo lejano de la barra, si logran abrirse paso, están los baños pero, más importante aún, la cocina. Si miran por la ventana, verán a dos o tres valientes mujeres tratando de mantener una oferta de platos variados para la interminable fila de clientes. No tiene sentido nombrar los platos, cocinan lo que pueden comprar localmente: pescado recién capturado, cerdo, cordero y jamones, salchichas, chorizos (salchichas de cerdo de color y sabor a pimientos rojos secos), varias verduras fritas en una masa de tempura y patatas que inevitablemente significan papas fritas. La comida y las bebidas de El Gato siempre son asequibles, no necesitas pensarlo dos veces antes de ceder a tu avaricia. ¡Disfruta el momento!
Went to El Gato 2 nights ago as staying with pals nearby. Villaricos was pretty much shut for the evening (a Sun night at 9pm) which is unusual in Spain but El Gato was open, so we gave it a go. Enjoyed some magro con tomate, and tortillitas de camarones. The house beer was good (according to those who drank it) and even if the service was a bit haphazard, it was a fun atmosphere. We were a group of Spaniards but the waiter Jesus spoke some English and seemed ot be looking after his English clients well.
This is a proper Spanish bar that serves great tapas/food (try the Magra con tomate and the calamari) at a very reasonable price, probably the cheapest drinks in the village, you can have a great night out with food and drinks at less than half the cost of going to a restaurant. The staff are friendly even the owner who appears grumpy, but no English is spoken so you will have to make yourself understood.
