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Reseña
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Me he pensado muy mucho si escribir o no una reseña, porque lo cierto es que tiraría piedras sobre mi propio tejado, ya que llevo unos cuantos fines de semana intentando reservar sin éxito y, con esto, no creo que ayude mucho Pero bueno, hay que ser honesto, así que a por ello: He estado veces en el último año y sin duda volveré (a ver si pillo habitación). Es un hotel estilo noucentista y, como tal, da la nota perfecta. Tanto decoración, como ambiente se mezclan de forma genial en habitaciones, terraza-jardín que hace las veces de lounge chill out y salas comunes. De las habitaciones doble classic en las que hemos estado, nos encantaron y estuvo muy bien. Quizás por sacar punta al lápiz, ésta última fue un tanto calurosa (problema siempre solucionable con el aire acondicionado, por supuesto). El desayuno, servido en su encantadora terraza e igual para todos, es completo, de calidad y debo añadir que riquísimo. Su precio, además, muy bueno (ahora no lo subáis, pillines). En definitiva, un hotel para pasar un fin de semana idílico en un lugar encantador como lo es Sitges y para gente que no busque los ultramodernos hoteles saturados de luces led y pantallas táctiles.