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Reseña
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Helado con sabor italiano en la Alameda completa de Hércules. La dificultad para aparcar en la zona puede ser un inconveniente; es mejor ir a pasear o utilizar el transporte público. El interior es sencillo y no muy amplio, con una gran vitrina de helados y un par de mesas altas con taburetes. No hay mesas al aire libre. Ofrecen una buena variedad de sabores y la relación calidad-precio es adecuada. La ración que sirven en el frasco es bastante abundante. Para probar algo nuevo, pedí un toque de pomelo; fue muy refrescante, aunque creo que seguiré prefiriendo los sabores tradicionales. La chica que nos atendió fue muy amable. Cuando estuvimos allí (5 de agosto), no había nadie, pero luego ll...