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Reseña
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Buena comida, trato familiar, precio correcto y cantidad abundante. Llegamos casi una hora antes del cierre y ciertamente estaba todo como si había pasado un huracán, la gente va a comer en masa y a nosotros nos pillo cerca para almorzar, tiene una terracita lateral y una al frente más pequeñita, dentro hay unas cuantas mesas, las chicas no vimos chicos cuando estábamos) muy atentas y la comida rápida, al principio notamos un poco el cansancio, pero se notaba que la jornada había sido intensa, la gente de la zona habla bien y de ella y se nota con la cantidad de gente que va, abren para desayuno y almuerzo y luego cierran para abrir para la cena. Vale la pena probar.