2 /5
Reseña
★
★
Fuí cuatro veces. La primera esperé unos 15/20 minutos y como nadie vino a atendernos a pesar de pasar por al lado nuestro los camareros varias veces), me levanté y me fuí. La segunda vez, un camarero portugués nos atendió muy amablemente. La tercera vez, nos sentamos adentro cerca de las 20 hs. de un domingo y le pedimos al camarero que nos tocó, algo para comer. La respuesta fué increíble: a vos seguro que te gusta comer bien, como a mí, mejor andá al bar de enfrente que allí si tienen platos buenos para comer Ante la sugerencia especializada, nos levantamos y nos fuimos al de enfrente. La cuarta y últimas vez, llevamos a nuestro hijo a jugar al fútbol a la plaza y nos sentamos con mi muje...