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Reseña
★
El año pasado compré el roscón en Viña, y fue el mejor que había comido nunca, por eso este año volví a comprarlo esperando una cola de 1 hora. El roscón de este año es malísimo, el hojaldre muy apelmazado y de hace muchos días y como si fuese de panadería. Cuesta bastante poder comerlo, de tal forma que el resto va para la basura. El precio carísimo, casi 34 euros, que no me quejaría si estuviese rico, pero no hay dios quien lo coma de malo. El azúcar se lo hechan por encima a discreción antes de servirlo, la faba y la figura la meten con el dedo rompiendo el roscón por debajo, una guarrada, y el hojaldre duro, apretado y apelmazado y el sabor malo. Aconsejaría a la gente no volver a compra...