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Reseña
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Anoche de comer fuera para ayudar. Esperar un poco cuando llegamos y la puerta estaba abierta, así que estábamos parados en una corriente fría. Bastante esperar para conseguir vasos para poder servir nuestra propia bebida y los precios del descorche no son evidentes hasta la factura final. Aunque la comida era buena o los platos clave estaban apagados y el menú es mucho más pequeño que en la casa anterior, lo que al pensarlo era más cómodo y su peculiaridad se sumaba a la experiencia general. El personal con el que hablamos fue amable y atento, pero no puede evitar sentir que la ubicación estéril junto con Kanteen hará que este sea solo otro lugar de tapas en medio de mucha competencia.