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"El restaurante es una maravilla, pero si hablamos del cuidado de la cota con el guardián es un poco vergonzoso. Te dice que cuando las truchas gotean te hagan moverte al lugar de la cota, y cuando llegas allí te encuentras que no hay chinos en el agua y encima te dice que no tiene la culpa de que los peces no coman. A menudo sin vergüenza."
Platos: 0
Categorías: 2
Reseñas: 2
A medio camino entre Feez y Elche de la Sierra, encontrarás este restaurante que, aunque feo por fuera, sorprende gratamente por dentro. Tiene una cocina muy buena y unas vistas insuperables. Está construido sobre un pequeño acantilado que provoca la depresión del río Segura a su paso por aquí. Desde su terraza se pueden disfrutar de bonitas vistas del río. Al ser una zona de pesca, el restaurante asegura que siempre podrás probar pescado fresco. A esto debemos sumar, una vez más como en la mayoría de los restaurantes de la zona, la excelente calidad de las carnes que suelen venir de las granjas cercanas. Los precios son asequibles y baratos, como siempre en toda la zona.
Ubicado a medio camino entre Ferez y Elche de la Sierra, este restaurante sorprende a pesar de su aspecto poco atractivo por fuera. Cuenta con una excelente cocinera y unas vistas inigualables. Está ubicado en lo alto de un pequeño acantilado con vistas al río Segura, lo que ofrece unas hermosas vistas desde su terraza. Gracias a su ubicación en una zona de pesca restringida, el restaurante siempre cuenta con pescado fresco. Además, al igual que la mayoría de los restaurantes de la zona, ofrece carnes de alta calidad provenientes de las granjas locales. Los precios son asequibles y bastante económicos, como es común en toda la zona.
Por el restaurante es todo una maravilla pero si hablamos del coto cuidado con el guarda es un poquito bastante sinvergüenza te dice que a soltado las truchas te hace de desplazarte hasta el lugar del coto y cuando llegas allí te encuentras que no hay ni chinatos en el agua y encima te dice que el no tiene culpa de que los peces no coman jjejej menudo sinvergüenza
El restaurante es una maravilla, pero si hablamos del cuidado de la cota con el guardián es un poco vergonzoso. Te dice que cuando las truchas gotean te hagan moverte al lugar de la cota, y cuando llegas allí te encuentras que no hay chinos en el agua y encima te dice que no tiene la culpa de que los peces no coman. A menudo sin vergüenza.
