5 /5
Reseña
★
★
★
★
★
Estuve hace unos días con unos amigos. El restaurante en una de las calas más bonitas de la isla. El acceso es complicado y salir de allí se complica por lo empinado del acceso, pero, sin duda, bien vale la pena. Un chiringuito de los de toda la vida, nada que ver con los Beach Clubs de moda. Comida tradicional, a base de pescados, mariscos y arroces. Nosotros nos metimos entre pecho y espalda unos gallos de San Pedro al horno, con unas patatas chips tremendas. Vimos también salir unos cuantos arroces y unas lubinas a la sal. Todo con una pinta espectacular. El Excelente actitud. Y si uno quiere darse un chapuzón, el agua está a dos pasos. Sin duda, más que recomendable. Volveremos.