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Reseña
★
Fuimos a este bar porque queríamos beber y comer algunas tapas. Dado el nombre, uno esperaría encontrar una amplia selección de ellas, sin embargo, ni siquiera una sombra. Solo un pequeño menú con algunos platos, hot dogs, papas con salsa, sándwiches y crepes. En ese momento pedimos las crepes: precocidas (como nos confirmaron al preguntar) y también frías, y en la de chocolate que supuestamente debía llevar nata (que no había), encontramos un trozo de cebolla que probablemente estaba en la sartén utilizada para calentarla (no lo suficiente). Además, 4 euros por una crepe precocida parece un poco excesivo. El servicio fue aproximado, lento y poco cuidado. No volveremos y no lo recomendamos.