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Reseña
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Mi esposo y yo hicimos una reserva de último minuto en este restaurante que estaba bien calificado en OpenTable. Nos sentamos afuera en una hermosa noche. Nuestra camarera fue agradable, atenta, conocedora, hizo sugerencias y dio su opinión cuando se le preguntó a una verdadera profesional. Comenzamos con un plato de queso, que normalmente no probaría, ¡pero me sorprendió gratamente! Los diferentes quesos se sirvieron con una mostaza granulada, una mermelada de arándanos y moras y un poco de panal real. Para nuestro plato principal, tuve el pollo provenzal que estaba delicioso y cocinado a la perfección. Había olvidado lo húmedo que puede estar un pollo si se prepara correctamente. Fue una porción considerable que me dio la oportunidad de volver a comerla al día siguiente. Mi marido tenía las patatas fritas de pato. Limpió su plato y pidió que se llevaran las migas. Para el postre, tomé una pera pochada con jengibre sobre una deliciosa crema. Aunque la pera podría haber sido un poco más madura, el sabor era increíble. ¡Mi marido tenía un Pot de Creme y no compartió un bocado! Nos llevamos a casa el tercer postre que nos ofrecieron, una rebanada de pastel hecha con deliciosas crepas. Menos el tiempo durante el COVID, esta fue la mejor comida en general que hemos tenido en mucho tiempo. Volveremos