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Reseña
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Si decides pedir los waffles o el helado, tienes que visitar este lugar. Está dirigido por una familia belga, expertos en la cocina rural. Por lo general, hay una cola, pero vale la pena esperar. Todo está hecho a mano. Los waffles se hacen en el momento y puedes elegir el tamaño (se recomienda el grande) y los complementos, como nutella, chocolate belga o helado.