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Reseña
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Fuimos a Navidad. Una mesa de 9 comensales. Nos trataron maravillosamente, la chica estaba atenta todo el tiempo. Sabía cómo recomendar perfectamente las cantidades y aconsejarnos sobre los diferentes platos dependiendo de los gustos que le transmitimos. Es un lugar espacioso, con las mesas adecuadas para que no se sienta abrumado o el lugar se desperdicia. El acceso es fácil y adaptado para sillas de ruedas, pero si no hay espacio abajo, sólo puede subir a la planta superior por escaleras. El fregadero está obviamente adaptado. La comida es buena. Hay mejores mexicanos, pero la mayoría no. Así que este está en una muy buena posición para mí. Sin embargo, en febrero ya parecía cerrado temporalmente y no he vuelto. Así que no he podido verificar si es verdad o no. La verdad es que si finalmente es un cierre definitivo, será una vergüenza. No sólo para el negocio, obviamente, sino también para la gente. Un restaurante mexicano de buena calidad, y el único en Rubí. Opciones vegetarianas: Hay algunas opciones que no contienen carne. Estacionamiento: Las calles circundantes son peatonizadas, por lo que el aparcamiento es inexistente. Hay un estacionamiento cerca, el de la estación, pero hay que caminar entre 5 y 10 minutos dependiendo de su ritmo. Accesibilidad para silla de ruedas: Ancho para entrar y puerta ancha. Fregadero adaptado y espacio interior para poder moverse bien.