3 /5
Reseña
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La comida en general estuvo buena, excepto por el postre, una crema brûlée que llegó fría. Lo más decepcionante fue el servicio; no se pudo disfrutar porque la sensación era que había que desocupar la mesa rápidamente. Las chicas recogían los platos sin siquiera preguntar si habíamos terminado, incluso los vasos de bebida. Cuando estábamos pidiendo, el plato se colocó a mi lado para informar, lo cual ya me molestó, así que tuve que decir que en los mejores restaurantes me avisaban cuando estaba listo.