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la parrilla de la máquina, antiguo lux, muy agradable y elegante lugar, con varios ambientes bien diferenciados. comimos carne, confecciones y relación calidad precio bastante equilibrado y de post no podía faltar el pastel de queso al estilo del norte.
és un bon lloc per menjar carn torrada, a les grans ciutats no sempre es fa amb caliu i no té res a veure. en quant a vins hem begut vi del priorat una joia i ben bo. entre els plats destacaria el plat de tarta de formatge ha estat mel.
todo perfecto, buen producto, servicio y atención desde y local muy cuidadoso. Tardó un poco en traer los segundos para un problema en la cocina, y vinieron a pedir disculpas y advertir, y nos invitaron a los postres. altamente recomendada
buen ambiente con música, me encantó para cenar en plan informal, recomiendo las alcachofas, croquetas, jamón.
Muy bien, muy buen producto y perfectamente cocinado, el bacalao con pisto muy bueno la carne que se pidieron el resto perfecta
Me ha desilusionado, quizás porque el listón de sus primos de La Maquina lo tienen muy alto. Hay que destacar que el local es fantástico y es servicio inmejorable. Entrantes de croquetas de jamón y carabineros, bien pero sin vítores. Ensaladilla puestos a comparar de nuevo está mejor la de sus vecinos de La Máquina del número Steak Tartar correcto sin más, calamar a la plancha dijeron que bien pero lo ponen en un plato minúsculo que dificulta manejarse con los cubiertos, degustación de cocochas, las rebozadas muy secas y chipirones con arroz blanco sin comentarios por lo que debían estar normales Insisto que nada criticable pero tampoco elogiable
La comida en general bien como es habitual en los locales de La Máquina, sin embargo algunos detalles son para mejorar. El vino blanco del tiempo, devolvimos una botella y la segunda, por vergüenza, la tomamos pidiendo que echaran hielo en la cubitera para que enfriara un poco. No entiendo lo del vino blanco sin temperatura y menos en un local como La Máquina. El chuletón frio, tuvieron que llevarlo a calentar, con la consiguiente pérdida en la textura. Pedimos coulant de chocolate y nos traen una tarta de chocolate, lo decimos, y la respuesta fue que no había coulant y nos ponían la tarta, sin avisar, más o menos como si no supiéramos qué es un coulant. Los detalles son los que hacen que una buena comida, no lo sea.
