4 /5
Valoración media
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Reservamos para cenar en Fizz Gastrobar para el primer turno (de a Nada más entrar vino una camarera preguntándonos que queríamos para beber y si nos apetecían unas aceitunas o unos cacahuetes. Pedimos dos cañas y unas aceitunas. Pensábamos que serían el aperitivo gratuito que ponen con la bebida, pero nada más lejos de la realidad, nos cobraron euros por unas míseras aceitunas (un acto bastante miserable, cuando te las ofrecen ellos).Para cenar pedimos un wok de lentejas, unos baos, corvina y la tarta de queso invertida. Nada que objetar a la comida, ya que nos gustó todo un montón, donde destacaría el wok de lentejas. Lo que no nos gustó tanto fue el servicio, ya que nos sirvieron todo demasiado rápido. No nos dejaban comer a gusto, la camarera que nos toco, estaba venga preguntarnos que tal cuando teníamos la comida en la boca. Daba la sensación de que nos querían echar cuanto antes, al de un segundo de terminar un plato, nos traían el siguiente, no dejándonos tener una conversación en paz.Le pongo un cuatro y no un tres porque en El Puerto de Mazarrón no hay muchas opciones decentes y la verdad es que la comida estaba muy buena, pero el servicio fue nefasto.