2 /5
Reseña
★
★
En una guía certificada para personas con enfermedad celíaca, recomendaron este restaurante, así que decidimos ir. Una vez allí, le pregunté al camarero y pedí rabo de toro, ya que el menú decía que era sin gluten. Sin embargo, después de servir mi plato y empezar a comer, los camareros me informaron que no podía comer las patatas, ya que estaban contaminadas. Me retiraron el plato y me trajeron uno nuevo con unas patatas aptas para mí, pero ya las había probado antes y me habían contaminado. Es bastante importante no cometer estos errores con personas con enfermedad celíaca, ya que no se trata de una simple intolerancia, sino de una enfermedad autoinmune. En cuanto al servicio, tuvimos que...