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"excellent!"
Teléfono: +34985884488,+34985871720,+34984188593
Dirección: Calle Rufo Rendueles 6 Bajo, 33430, Carreno, Spain
Ciudad: Carreno
Lunes: 10:00-00:00
Martes: 10:00-00:00
Miércoles: 10:00-00:00
Jueves: 10:00-00:00
Viernes: 10:00-00:00
Sábado: 10:00-00:00
Domingo: 10:00-00:00
Platos: 37
Comodidades: 8
Categorías: 5
Reseñas: 2551
Candás es un pequeño pueblo asturiano de pescadores, ubicado muy cerca de Luanco (quizá más conocido porque está más orientado al turismo) y a 14 Km de Gijón. No tiene grandes infraestructuras, pero es muy frecuentado por gijoneses, especialmente en verano, ya que sus chigres (sidrerías) tienen fama de tener buenos productos y de calidad, y a muy buen precio. La Sidrería El Muelle se encuentra justamente enfrente del puerto pesquero, y está especializada en cocina típica asturiana, así como en pescados y mariscos recién pescados del Cantábrico. En su carta podemos encontrar calderetas, parrilladas, marisco del día, paellas, pastel de cabracho, fritos de pixín (rape), lubina en salsa de oricios, chorizo a la sidra, etc. Si el tiempo lo permite suelen sacar terraza al exterior, que enseguida se llena. El interior del local tiene dos alturas, a nivel de calle se encuentra la sidrería, y en una especie de altillo, al fondo de ésta, el comedor, decorado en plan rústico. He comido varias veces en esta sidrería, algunas en plan raciones para picar, y otras he ido exclusivamente a comer una mariscada en la te ponen buey, centollo, langostinos, almejas... Todo a la parrilla, excepcional. Si bien la última vez que estuve me pareció muy escasa , la bandeja era enorme y había cuatro cositas, viéndose todo el fondo, lo cual no daba buena imagen. Aunque el sitio tenga aspecto de cutrillo, la comida es de excelente calidad, y el trato muy familiar. No es caro, aunque claro está, el buen marisco hay que pagarlo. En ocasiones tienen ofertas que indican en la pizarra que tienen en la fachada, con una mariscada para 2 personas por 50€, incluyendo vino y postre.
Un fracaso. Éramos cinco personas y no podíamos comer a la vez, pedimos un entrante y lo trajeron cuando dos personas empezaron a comer, los otros tres pidieron sardinas a la plancha y no eran sardinas, eran parrochas y dos que eran más grandes estaban crudos. Al final nos fuimos sin comer postre ni café. Por supuesto que no volveremos ni lo recomendaremos.
